Al final, a pesar de todos los problemas que me ha dado adaptar la web, me tenéis aquí dando caña antes de lo que pensaba, aunque con algunos cambios. Hasta enero del año que viene sólo habrá una actualización por semana, porque he tenido que apuntarme a clases de pilates para poner a tono la musculatura antes de empezar a vestir el traje de 1879 (con toda la tela que va a llevar, mínimo tres kilos) y porque no voy a tener mucho que contar hasta que me organice y empiece a trabajar de nuevo en serio… porque las vacaciones de costura han sido largas 😉
También me he embarcado en un par de proyectos extra (nanowrimo durante noviembre y dos webs más) que me van a comer algo de tiempo, y me he enganchado al Angry Birds XD
Y sin más dilación, empezamos con el TAST 🙂
Está visto que entre más laboriosos los puntos más me gustan. El «drizzle stitch» no es exactamente difícil de hacer, pero lleva cierto tiempo acostumbrarse. Queda precioso en seda y aunque creo que no es precisamente un punto tan antiguo como 1812, voy a usarlo cuando por fin empiece a bordar mi ridículo.
La traducción del punto de ojal anudado no es oficial, es que me gusta usar nombres en castellano y esta era fácil de hacer 😉 En la foto es el punto trabajado en algodón negro y seda azul. Otro punto sencillo que no estoy segura de llegar a usar más allá de los dechados.
Este no es exactamente un sólo punto. El «beaded hedebo edge» se trabaja como si estuvieses haciendo una presilla de hilo para un botón, pero más ajustada y con una cuenta entre cada una. En la foto podéis ver la prueba que hice para usarla como «peso» para mejorar la caída de un velo de escala 1/4, pero puede usarse perfectamente para ocultar uniones entre telas en crazy quilting o simplemente para hacer una línea de adorno.
¿A que el «knotted loop stitch» parece un cienpiés? 🙂 Este es de los poco puntos que, a pesar de ser facilones, me gusta mucho.
Un punto gracioso pero que no me acaba de convencer. El «Italian border sitch» parece dar mucho juego a otras personas, pero en mis bordados aún no le he encontrado un uso decente.
Me encanta el bordado que queda elevado de la tela, así que el «buttonhole wheel cup» tenía que ser de mis favoritos. En la foto podéis ver la pequeña muestra que me ha dado tiempo a trabajar esta semana para ir aprendiendo, pero seguro que veréis más en otros bordados que haga 😉
¡Ah! Casi se me olvida comentar que por fin he terminado el curso de patronaje industrial, con un «apto» en el exámen. ¡Soy libre! 😀