Tras más de cuatro meses con este proyecto rodando por casa, lo he terminado y he aprendido un montón de cosas con él:
– Un obi, aún para una muñeca, necesita una tela gruesa (no deberían quedarle arrugas)
– Forrar algo no es tan fácil como parece
– Si el traje va a llevar dos capas, las telas han de ser lo más finas posibles.
– Antes de ponerme a cortar y coser algo que usa una técnica diferente de la habitual, buscar la mayor información sobre el tema que pueda encontrar.
Con todo, el resultado final es bonito si bien un poco «tieso».
Te ha quedado espectacular, nena. Me gusta mucho el estampado del kimono. A ver si algún día puedo verlo en persona. ¡Ánimo con tus proyectos! 🙂
¡Gracias Judith! Cuando estés por aquí recuérdamelo un día y la bajo para que la veas en directo 🙂
Me gusta mucho como te ha quedado. Yo quiero hacer uno para un muñeco que tengo. Podrías pasarme el patrón, please?
Me alegro de que te guste el kimono, pero desgraciadamente no puedo pasarte el patrón, ya que lo hice a mano y no tengo suficiente tiempo libre con todos mis proyectos para digitalizarlo correctamente. De todas formas, tengo en una de las entradas antiguas un patrón de yukata para Pullip (yukata y kimono se cortan iguales) y puedes adaptar a las medidas de tu muñeco. ¡Espero que te sirva! 🙂
Muchas gracias! Lo intentáré! 🙂